La segunda movilidad Erasmus nos llevó a Lisboa, de la mano de la asociación Lusitango.
En esta ocasión, la experiencia estuvo centrada en el intercambio cultural y en aprender cómo acercar el tango a las personas mayores con enfermedades neurodegenerativas.
Los participantes recibimos formación práctica sobre cómo impartir talleres de tango adaptados, donde el movimiento, la música y el abrazo se convierten en estímulos para la memoria, la coordinación y las emociones.
Fue un encuentro humano y cultural que reforzó la idea de que el tango es un lenguaje universal capaz de unir corazones más allá de las fronteras.
👉 Gracias a Erasmus+, desde Canarias podemos vivir experiencias únicas y compartirlas con toda Europa.