La primera movilidad Erasmus nos llevó hasta Turín, donde compartimos unos días intensos junto a la Asociación Almagro. Allí descubrimos que el tango puede ser mucho más que baile: es un recurso educativo, terapéutico y social.
Lo que aprendimos en Turín:
- Conocimos de cerca las dinámicas emocionales y sociales que afectan a las personas con enfermedades neurodegenerativas.
- Exploramos métodos pedagógicos y terapéuticos basados en el movimiento y la danza.
- Trabajamos en la autorreflexión y el aprendizaje autónomo.
Habilidades que desarrollamos:
- Reconocer distintos estilos y ritmos de aprendizaje.
- Colaborar en equipo con empatía y comunicación eficaz.
- Adaptarnos a situaciones complejas con resiliencia y tolerancia.
Más allá de la teoría, esta movilidad nos hizo sentir la fuerza del tango como herramienta de conexión humana.


👉 Agradecemos al programa Erasmus+ por brindarnos la oportunidad de salir de Canarias, aprender en Europa y traer de vuelta estos conocimientos a nuestra tierra.